7 increíbles excentricidades que solo Pablo Escobar podía atribuirse
Pablo Escobar fue uno de los hombres más poderosos del mundo y su influencia alcanzó incluso hasta la política. Aquí algunas de las excentricidades que se podía dar.
Hubo un tiempo en el que Pablo Escobar se convirtió en el hombre más buscado de Colombia, en el narcotraficante más terrible de Latinoamérica y en uno de los hombres más millonarios del mundo. No caben dudas que el narcotraficante colombiano tenía mucho poder para lograr lo que él quisiera. Su hijo mayor, Juan Pablo, reveló muchas de las cosas que Escobar hacía. Aquí algunas de ellas:
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1. Regalos que le hacía a su hijo
Juan pablo, el hijo mayor del narcotraficante, reveló en su libro que su padre empezó a darle regalos lujosos cuando era un niño: “En mi noveno cumpleaños, 1996, recibí un regalo único que, debido a mi inmadurez, no tuvo un gran significado: un cofre con las cartas de amor originales que Manuelita Sánchez le había escrito al libertador Simón Bolívar”, dijo. “En el año 1988, cuando cumplí once años, ya tenía una colección al menos 30 motos, karts, triciclos y buggies de las mejores marcas, así como un montón de motos de agua.
2. La fiesta de cumpleaños
Según cuenta su hijo, era común que en su cumpleaños organizara subastas en la Hacienda Nápoles donde rifaba pinturas y obras de arte muy valiosas. Así él pensaba que los asistentes se irían muy contentos.
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3. El impresionante edificio “Mónaco”
Esta es una de las grandes construcciones del narcotraficante. Allí alojó a 10 personas, incluidos su esposa (la Tata) y sus hijos. Asimismo debajo de esta residencia construyó una pequeña prisión para sus rehenes.
4. Las fiestas temáticas
En las celebraciones, los asistentes debían estar vestidos de acuerdo a las temáticas que se imponían. Además, cuando la ‘Tata’ era la organizadora enviaba los sastres más exclusivos y modistas para que diseñaran los disfraces a la perfección.
5. Celebración de Año Nuevo
En Navidad, el narco ordenaba dos contendores gigantescos llenos de fuegos artificiales y pólvora valorizados aproximadamente en 50 mil dólares. Una parte era entregado a sus empleados para que se diviertan y la otra parte quedaba para su familia.
6. La Hacienda Nápoles
La lujosa propiedad constaba de 20 kilómetros e incluía una casa colonial española, un parque de esculturas y un zoológico con numerosos tipos de animales exóticos de diferentes continentes.