7 tips para evitar que tu cepillo de diente sea un foco de gérmenes
¿Sabes en qué condiciones se encuentra tu salud bucal? Hoy lamentamos darte una noticia que no será de tu agrado, pues sucede que por más que te laves los dientes tres veces al día, uses hilo dental y vayas periódicamente al dentista tu salud bucal estaría corriendo un grave peligro, y todo por culpa de tu cepillo.
Así es, ese pequeño aparato que en muchas ocasiones nos ha salvado de más de una ahora se ha convertido en un gran enemigo de nuestros días, y no precisamente por su uso, sino por cómo lo conservamos y por el tipo de cuidados que le damos. Hoy vamos a compartir contigo una lista de consejos de especialistas para que le pongas fin a los problemas bucales y evites que tu cepillo sea el dulce hogar de los gérmenes.
NO TE PUEDES PERDER ESTO: POR CUÁNTO TIEMPO SE DEBE CONSERVAR EL CEPILLO DE DIENTES, PERFUME Y MÁS COSAS DE USO PERSONAL
#1 Guárdalo en un lugar apropiado:
Debido a que los cepillos son por lo general guardados en el baño están expuestos a una gran cantidad de gérmenes fecales, y como consecuencia a esto nuestra cavidad oral está infestada por cientos de microorganismos que se han transmitido por medio del cepillo, esto según la periodoncista María Geisinger.
#2 Lávate las manos luego de usar el baño:
Las bacterias que se alojan en el intestino son capaces de saltar del inodoro hacia tu boca, siempre y cuando no laves tus manos después de ir al baño, por eso es prácticamente obligatorio que asees tus manos, así reducirás las probabilidades de una contaminación fecal oral, explica Geisinger.
#3 No guardes tu cepillo en un lugar cerrado:
Si guardas tu cepillo en un lugar cerrado corre el riesgo de estar en un ambiente húmedo, el mismo que es más propenso frente al crecimiento de microorganismos, es decir, convertirás dicho recipiente en el habitad perfecto para millones de gérmenes, entonces lo recomendado es ponerlo en un vaso, o algún recipiente sin tapa. Esta recomendación es según la Asociación Estadounidense Dental.
#4 Asea adecuadamente tu cepillo:
El cepillo debe ser lavado obligatoriamente, y no te preocupes que esa no es una tarea tan difícil. Lo importante es que siempre se ponga en práctica, una alternativa para esto es enjuagarlo a fondo con agua potable o empaparlo con enjuague bucal según María Geisinger, peridoncista experta.
NO DEJES DE VER ESTO: ESTAS SON LAS 9 COSAS QUE POR EL BIEN DE TU SALUD NO DEBERÍAS PRESTAR
#5 El cepillo de único es personal:
Recuerda esta regla de oro, por más que ames a la otra persona, sea tu media naranja, tu otra mitad, sangre de tu sangre o ‘hijo de tus extrañas’ (como diría la Chimoltrufia), no debes de prestar tu cepillo a nadie porque no solo se comparten los cepillos sino también las bacterias, las mismas que causan caries y enfermedades bucales.
#6 Cámbialo regularmente:
No puedes usar el mismo cepillo por un año, ni seis meses, el máximo periodo útil de estos artículos es de 4 meses o menos dependiendo del tipo de cerdas y de la calidad del cepillo, no te excedas con el tiempo de uso.
#7 Guárdalo verticalmente:
Según la especialista Maria Geisinger en un artículo publicado en la BBC, los cepillos deben ser guardados de forma vertical para que sequen por sí solos. Y además debes evitar que se acerquen demasiado a otros cepillos, así te librarás de una contaminación cruzada.