¿Fuiste un niño rebelde? La ciencia afirma que de adulto tendrás un mejor sueldo

image internalEstudio fue publicado en una famosa revista de ciencia

¿Se te hacen familiares las pataletas y los berrinches? ¿Cuándo eras niño te mandaron muchas veces al rincón por portarte mal? ¿Eras el dolor de cabeza de tus profesoras? Si todas tus respuestas fueron sí significa que eras un niño rebelde y terco, de esos que nadie podía controlar y esta nota es especial para ti. ¡Presta atención, y no, no es una orden así que no empieces con el berrinche!

Una regla básica en la crianza de los niños es enseñarles a prestar atención a los adultos y a los maestros pues solo así serán personas exitosas, sin embargo la ciencia afirma todo lo contrario. Según un estudio científico los niños rebeldes y tercos tendrán una mejor posición en el mercado laboral cuando sean adultos. ¿Cómo así?

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Los niños rebeldes y obstinados suelen desafiar a sus padres y no hacerles caso, ahí justamente estaría el secreto de su éxito en el futuro según el estudio publicado en Developmental Psychology.

“Podríamos suponer que los estudiantes que obtuvieron una puntuación alta en esta escala pueden obtener mayores ingresos, ya que están más dispuestos a ser más exigentes durante los momentos críticos, como en la negociación de los salarios o el aumento", "Por ejemplo, los individuos que puntúan bajo en agradabilidad también se mostró a ganar más dinero”, explican los autores de la investigación.

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Además, el secreto también estaría en la competencia, pues este tipo de niños no tendrían miedo de avanzar a fin de lograr sus propios intereses sin importar el resto.

Por otro lado, los científicos encontraron otra explicación, y es que los niños tercos y obstinados tienen niveles más elevados en cuanto a rompimiento de reglas y desafío a la autoridad, y por ende los padres también tienen niveles más altos de ganas de luchar por sus propios intereses, es decir se presenta una lucha sana entre niños y padres, y desencadenaría en un resultado favorable para los pequeños.