Si cortas una sandía y ves que está agrietada, cuidado, podría estar intoxicada
¿Sabías que muchas sandías podrían estar intoxicadas? Aprende a identificarlas y protege tu salud, esto es real y hay que prevenir.
Una de las frutas favoritas en el verano es la sandía, por su delicioso sabor y con la enorme cantidad de agua que posee, lo que la convierte en un alimento refrescante, pero una noticia en internet alarmó a todos los amantes de esta fruta, pues aunque se pensó que las “sandías explosivas chinas” eran mentira, cuando se investigó el tema se descubrió una peligrosa verdad: los agricultores chinos están utilizando fertilizantes con forclorfenurón, una sustancia altamente peligrosa para el consumo humano.
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El forclorfenurón es un químico capaz de aumentar el tamaño de la sandía hasta en un 20% más rápido de lo normal, además de afectar el sabor y textura. Al inicio lo relacionaron con las pepas blancas, pues el color normal debería ser negras, pero investigadores chinos declararon que no existía relación entre el color de las pepas con el uso del químico. Pero sí encontraron un detalle en las sandías que lo presentaban.
Los agricultores chinos están utilizando un químico para acelerar el crecimiento de la sandía, pero sería perjudicial
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La Agencia de Protección Ambiental (EPA) emitió un informe revelando que el forclorfenurón también es usado en kiwis y uvas, y aunque no es cancerígeno, sí puede ocasionar lesiones en el interior del estómago, problemas en la piel e incluso intoxicación.
Si encuentras una grieta en la sandía ¡Deberías desecharla!
Así que ya lo sabes, si ves una sandía con una enorme grieta en el centro, lo mejor será que no la comas ¡Tu salud está en riesgo!