REVIEW: Call of Duty: Black Ops Cold War - De conspiraciones y zombies

Por: Oscar D. Hurtado Beteta.

Pasa la vida y los tiempos cambian, sin embargo este pasatiempo que nos reúne tiene ciertas constantes. Un año no puede pasar sin ver el lanzamiento de un nuevo Just Dance, un nuevo juego de PES o FIFA y por ahí una nueva entrega de Assassin’s Creed si las cosas van bien dentro de Ubisoft. Este año, con pandemia y todo, no fue la excepción para Activision y su estudio Treyarch. Justamente estos últimos fueron quienes tuvieron que asumir la responsabilidad de esta entrega de Call of Duty, luego de numerosos desafíos durante el desarrollo entre Sledgehammer Studios y Raven Software.

Tras haber tomado la posta, el equipo de Treyarch vuelve este año con Black Ops, una serie dentro de la franquicia Call of Duty que hizo su debut hace 10 años. Activision espera que el éxito de Modern Warfare (Infinity Ward, 2019) se repita con Call of Duty: Black Ops Cold War (“CoD: BOCW”, de ahora en adelante). Intenciones que quedaron claras luego del cálido recibimiento del battle royale gratuito Warzone y su futura integración a este título. ¿Podrá Treyarch dar la talla? ¿Apelar a la nostalgia con la inclusión de viejos conocidos, elevados a leyenda, dará resultados? Respondamos esas y más preguntas a continuación.

Una guerra bien fría por favor

De arranque deben saber que esta es una de las mejores campañas que Call of Duty puede ofrecer. Si bien estamos ante la fórmula conocidísima de disparar, luego abrir una puerta en cámara lenta, para luego seguir disparando hasta que nos encontremos con la siguiente secuencia cinemática; este modo historia aprovecha su ambientación -la Guerra Fría a inicios de los ochenta- y nos permite ser parte activa de una historia de espías. Y déjenme decirles que, como fan de la franquicia Hitman, recibí con brazos abiertos las secciones dentro de la campaña que involucran el uso del sigilo para salir airoso del desafío de turno.

Esta historia la veremos a través de los ojos del agente “Bell”, es decir, nosotros. Así es, el juego te permite crear un personaje único con el nombre que desees al que incluso le podrás asignar vinculación con la CIA, la KGB o incluso con la MI6 al servicio de su Majestad. Aparte de seleccionar el género de tu personaje, o la no-definición de esta característica, podrás elegir dos rasgos para tu perfil psicológico. Estos determinarán tu desempeño durante el combate al estar ligado con la forma en la que tu personaje reacciona al conflicto.

Ni bien inicie la campaña verás a viejos conocidos como Alex Mason, Frank Woods y Jason Hudson de Black Ops. Sin embargo también habrán personajes que harán su debut en este juego. Entre los nuevos resalta sin duda alguna Russell Adler, quien tiene las riendas del pequeño equipo del que formamos parte. Él estará a cargo de dar las instrucciones y datos claves de las misiones que se llevarán a cabo. Estas solamente iniciarán luego que nosotros lo decidamos usando el panel de misiones. ¿La misión? Seguirle los pasos a un “agente durmiente” de nombre “Perseus”. Su retorno en actividad pone en riesgo la integridad y el estilo de vida de occidente.

Debes saber que el modo para un solo jugador de CoD: BOCW consta de 16 misiones principales y dos misiones secundarias. Estas últimas pondrán a prueba tu curiosidad, ya que deberás reunir evidencia que está en los diversos escenarios de las misiones principales. ¿Un escritorio con papeles y archivos? Es muy probable que una evidencia se esconda ahí. El juego recompensará esos segundos extra que inviertas en cada pieza de evidencia durante tu paso por las diversas locaciones que visitarás. Es menester aclarar que completar las misiones secundarias es enteramente opcional. Justamente con las “opciones” es que me gustaría cerrar el apartado de la campaña.

A medida que vayas avanzando en la historia, ciertos personajes te preguntarán acerca de algún curso a seguir. Estas decisiones no afectan el transcurso de la campaña, a excepción de la pregunta que Adler te hará en la misión denominada “Identity Crisis”. La forma en la que le respondas a este personaje con cicatriz desencadenará un final bueno o un final malo. Lo bueno es que el juego te permitirá jugar el final que no escogiste, con la finalidad de que tú decidas el desenlace. Bueno, hasta que la potencial integración con Warzone nos haga ver cual es el final canónico.

Un multiplayer sin Cortina de Hierro

Siguiendo el ejemplo establecido por Modern Warfare (2019), el modo multiplayer de CoD: BOCW cuenta con cross-play desde el primer día, además de cross-progression a través de la cuenta CoD que poseamos. Esto nos permitirá jugar sin límites en todos los sistemas que poseamos y con toda la gente que deseemos. Atrás quedó el modelo de negocio basado en  pases de temporada y se sabe que en diciembre iniciará la Temporada Uno de este juego, por lo que un nuevo battle pass estará a la orden cuando inicie.

Una constante dentro de esta franquicia es que la transición inicial al nuevo multiplayer se podrá sentir algo brusca, y eso está en función del tiempo invertido en el título del año pasado. Mis primeras partidas consistieron en querer llevar mi estilo de juego de Modern Warfare al frenético gunplay de Black Ops. Un craso error. El haber regresado a CoD luego de muchos años, me chocó el cambio. Sin embargo, debo admitir que me he adaptado favorablemente y varias “Play of the Game” me han sido otorgadas al final de algunas partidas. Eso sí, considero un tanto extensa la duración de esa parte. Desde el acceso Alpha, su presencia se alargaba innecesariamente.

Al ser el alma y el corazón de cualquier entrega de CoD, el modo multiplayer se mantiene fresco y no solamente ofrece los clásicos modos de Team Deathmatch o las partidas por objetivos. “VIP Escort” es un intento que funciona muy bien hasta donde lo pude experimentar. En este modo un integrante es el VIP que debe escapar en determinado punto mientras que el resto de su equipo lo defiende. El otro equipo deberá evitar el escape a toda costa, tratando de minar a la escuadra contraria o ganar automáticamente abatiendo al VIP. Nada de respawn hasta que acabe la ronda. 

La influencia del modo Ground War se hace sentir en el modo “Combined Arms”. Si bien el tamaño de los equipos se redujeron de 32 a 12 integrantes, no se siente tan abrumador como su equivalente de Modern Warfare a pesar de también contar con vehículos. Por otro lado, el modo Fireteam: Dirty Bomb nos lleva a un recóndito lugar en donde descenderemos, en escuadrones, al estilo battle royale. A medida que nuestros enemigos van cayendo, debemos procurar reunir Uranio para detonar las bombas en el lugar. Al caer junto a 39 personas más, este modo parece querer rivalizar con la versión más rápida del battle royale de Warzone. Si bien eso último fue una conjetura, tengo la certeza de que no volveré a jugar Dirty Bomb a menos que esté muy aburrido.

Zombies y conspiraciones Nazi

La presencia de los zombies han sido sello de la serie Black Ops desde su inicio. Cold War nos pone nuevamente ante la amenaza de los no-vivos junto a tres amigos más en línea. El mapa “Die Maschine” es en donde nuestra lucha con los muertos vivientes tomará lugar. Aquí ocuparemos el rol de un agente perteneciente a “Requiem”, una organización con apoyo de la CIA, que debe investigar lo que está sucediendo en un búnker de la Segunda Guerra Mundial. Y sí, lo que encuentran son zombies que te irán atacando mientras que tú y tus compañeros se abren paso en este misterioso lugar.

El modo exclusivo para los usuarios de consolas PlayStation se denomina “Zombie Onslaught”. En este modo podremos, junto a un amigo en línea, hacerle frente a hordas de zombies en un espacio reducido (la zona segura) dentro de un mapa multiplayer. Este espacio irá cambiando de lugar y nos tendremos que mover para no ser despachados antes de tiempo. Para animar un tanto las cosas, un zombie de categoría “Elite” aparecerá en ocasiones. Este enemigo es más fuerte que el resto de zombies, así que un ataque coordinado será la clave. Los amigos que posean alguna consola Xbox o PC recién podrán disfrutar de este modo en octubre del próximo año.

La cereza en este helado de zombies es el modo “Dead Ops Arcade 3”. Así es, este modo vuelve luego de haberlo visto por última vez en Black Ops III (2015) y con novedades que serán gratamente recibidas por quienes lo extrañaban. Dead Ops Arcade se juega en perspectiva cenital, como si de un shooter con controles de dos sticks se tratase. Durante tu paso por los lugares que visitarás podrás dar cuenta de hordas de zombies bien nutridas. Podrás obtener un sin fin de armas y hasta un ítem que te permitirá jugar en primera persona por un tiempo limitado. ¿Divertido? Por supuesto, hasta tres amigos más podrán unirse contigo a la masacre.

Un motor gráfico que se rehúsa a retirarse

Lamentablemente no todo es “color de rosa” con CoD: BOCW. Muchas amistades han coincidido en que, luego de lo visto con Modern Warfare el año pasado, este juego se se ve como una versión severamente modificada de Black Ops IIII. No me malinterpreten, hay ocasiones en las que el juego brilla. Lo detallado de las cinemáticas en la campaña, los rostros del presidente Ronald Reagan y de Mijaíl Gorbachov reflejaban fielmente a sus contrapartes de carne y hueso. Incluso una de mis partes favoritas es dentro de las instalaciones de la KGB, es brillante. Sin embargo, a nivel de interacción, se nota que aún estamos moviéndonos usando parte de un motor gráfico que debió pasar a mejor vida hace unos años.

Los escenarios carecen de ese aliento de vida que el talentoso equipo de Infinity Ward pudo soplar figurativamente sobre MW. Poder apoyar tus armas para ser más preciso, la capacidad de afectar el escenario notablemente con tus disparos, la posibilidad de abrir o cerrar puertas en el modo multiplayer como elemento para la estrategia y muchas cosas más, son de las tantas inclusiones que se esperaban de este título. Desafortunadamente esas ausencias se hicieron sentir y se suman al sentimiento de querer dejar el juego para volver al multiplayer de MW con las armas y accesorios que ya hemos desbloqueado.

En conclusión

CoD: BOCW es un juego que ningún fan de la franquicia Black Ops puede darse el lujo de perderse. Si eres de aquellos que sí se dan el tiempo de jugar el modo campaña, saldrás satisfecho por la variedad de actividades a realizar, así como también las opciones a escoger. El factor de rejugabilidad no solamente se limita a los dos finales disponibles, sino también en las respuestas que obtengas de los NPCs en determinadas situaciones.

Con un multiplayer que promete mejorar, un modo zombies con harto contenido y una futura integración con el battle royale gratuito Warzone, este título será el engreído de muchos aficionados a los First-Person Shooter hasta el próximo año. Si bien he elogiado sus puntos más fuertes, sus limitaciones a nivel de motor gráfico opacan en cierta medida sus logros.

PUNTAJE: 7.5/10

Pros:

• Un buen modo campaña que se eleva a nivel excelente en su último acto.
• Un modo Zombies con mucho contenido.
• Nuevos modos en el multiplayer.
• Personajes carismáticos.
• La habilidad de poder cambiar el FOV (Campo de visión, en inglés) en consolas por primera vez.

Contras:

• El uso del motor gráfico de Black Ops III y el de Modern Warfare no termina de cuajar.
• La “rigidez” de las armas en el modo multiplayer.
• El clip de “Play of the Game” es innecesariamente largo. Esos 20 segundos se sienten como una eternidad.

Nota: Este review fue realizado con una copia digital para prensa otorgada por PlayStation Latinoamérica para PlayStation 4.