Michael Jackson: Hematomas, hongos, costillas rotas y más detalles escalofriantes sobre su autopsia
Han pasado 11 años desde que el rey del pop falleció, no obstante, ahora se han revelado más problemas de salud que padecía Michael Jackson.
Durante el 2009, se revelaron diversas historias sobre las cirugías estéticas y los problemas de salud de Michael Jackson, la cual impactó a todo el mundo. Como se recuerda, el rey del pop falleció en su mansión de Los Ángeles a la edad de 50 años, víctima de una sobredosis del anestésico quirúrgico Propofol.
Han pasado once años desde la muerte del ídolo, no obstante este fin de semana se dieron a conocer nuevos resultados del estudio forense. Los informes de la autopsia fue una lectura espeluznante, como si fuera sacado de una película de terror. También se supieran más detalles sobre las operaciones quirúrgicas, tatuajes, cicatrices y heridas misteriosas que tenía en el cuerpo, además también confirmó cuál es la verdad sobre su cambio de color de piel.
El cantante siempre insistió en que el cambio de su piel a lo largo de los años se debía al vitiligo que padecía. Esto finalmente fue confirmado por el Dr. Christopher Rogers, el médico que supervisó la autopsia, donde señaló que Jackson efectivamente sufría de esta enfermedad: "Por lo tanto, algunas áreas de la piel parecen claras y otras oscuras."
La autopsia también demostró que intentaron salvar a Jackson después de que fuera encontrado inconsciente. Es por ello que tenía hematomas en el pecho y las costillas rotas, pues se debieron a los intentos por revitalizarlo por parte de los paramédicos.
Por otro lado, los pies de Jackson “parecían podridos” dado que nunca quiso tratarse con un profesional. En el informe se reveló que estaba llenos de hongos, callos y heridas. Según su ex médico del rey del pop: "Estaban cubiertos de callos… y tenían una infección fúngica crónica avanzada. Resultó que siempre usaba calcetines porque se avergonzaba del aspecto de sus pies. Le sugerí que necesitaba un podólogo. Un día después de que sus pies fueran tratados, se sorprendió de que pudiera caminar y bailar sin dolor".
Como se recuerda, Jackson tuvo una adicción a los analgésicos y posteriormente sufrió un paro cardíaco provocado por el anestésico Propofol en junio de 2012, en el que finalmente falleció.