¿Cómo lograr lo que me propongo? 12 trucos psicológicos que debes emplear

Cada ser humano es un universo, con sus particularidades y propósitos que solo un verdadero poseedor de inteligencia emocional es capaz de administrar energía en cada persona a su alrededor y lograr la armonía de la convivencia, y por qué no, también su propia tranquilidad. Para lograr lo que nos proponemos no es necesario manipular a las personas, pero sí podemos conducir ciertos comportamientos y la Psicología está dispuesta a ayudarnos en esta meta.

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Te vamos a presentar las 12 situaciones más comunes a las que nos enfrentamos día a día y cómo podemos administrar las piezas a nuestro favor con el uso de trucos psicológicos. Para que todo funcione a la perfección, recuerda que debes utilizar tus 5 sentidos al máximo, en especial escuchar y observar. Conozcamos estos trucos de la Psicología.

#1 Si de escoger un plan para una primera cita se trata, elige uno emocionante, que active la adrenalina, como una película de terror o subir a una montaña rusa. De esta manera te asociarán con el entusiasmo y la aventura del encuentro. También ayudará a que disfruten mucho más de tu compañía.

#2 ¿Quieres sonar convincente y confiado? No escribas ni digas “yo pienso” o “yo creo”, pues son expresiones que denotan falta de seguridad en lo que se dice. Además, suena reiterativo, porque: ¿quién se está expresando en primera persona?, ¿quién es el que cree?, ¿quién es el que piensa? Desde luego que tú.

#3 Si preguntas por algo que te interesa mucho conocer y te dan una respuesta vaga, mantén contacto visual y permanece en silencio. Así la persona en cuestión captará inconscientemente que lo que dijo no fue suficiente y te dará más detalles. Este silencio incómodo puede servir a tus propósitos.

#4 Basta con sonreír lo más amplio posible, aunque no te provoque, para que tu humor cambie a uno un poco más feliz, ¡inténtalo! Este tipo de expresiones corporales son combustible para las emociones.

#5 Cuando alguien se enoja contigo y mantienes tu compostura, es probable que se moleste incluso más, pero luego se sentirá avergonzado por tu calma y quizá regrese bajo otros términos.

#6 Esto es interesante. Si un grupo estalla de risa por alguna broma, los involucrados, entre risas, le echarán una mirada a aquellas personas con quienes se sienten más confiados, o en su defecto, observará con quien desea tener más cercanía (quizá románticamente).

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#7 Recordar nombres de personas que acabamos de conocer, es verdaderamente difícil para algunos de nosotros. No obstante, no subestimes el poder de hacer el esfuerzo de memorizar y llamarlos por su nombre en encuentros siguientes, ya que te considerarán encantador.

#8 Suele suceder que se nos queda grabado con mayor claridad lo que ocurre al comienzo y al final de cualquier situación, a diferencia de lo que sucede en la mitad del hecho. Por ello, si asistes a una entrevista de trabajo, trata de llegar de primero o al menos ser el último que atraviese la puerta (si es posible), te tendrán más presente.

#9 Tener contacto visual inspira confianza. Cuando te presenten a alguien, fíjate en el color de sus ojos, sin parecer invasivo. Este es un pequeño truco psicológico para lograr óptimamente este choque amistoso de miradas.

#10 ¿Estás aprendiendo un nuevo idioma o a tocar un instrumento? Cualquier actividad en la que te estrenes, toma en cuenta que si enseñas lo poco que sabes, más aprendes. Enseñar es una manera de ensayar y consolidar conocimientos.

#11 Cuando te acerques a alguien o hables con otra persona, fíjate en sus pies. Y es que si te acercas mientras dos personas conversan y solo mueven su torso con tu presencia, más no sus pies, esto significa que prefieren que los dejes solos. Asimismo, si hablas con alguien y sus pies apuntan fuera de ti, podría sugerir que desea abandonar la conversación.

#12 Cuando te acerques a alguien o hables con otra persona, fíjate en sus pies. Y es que si te acercas mientras dos personas conversan y solo mueven su torso con tu presencia, más no sus pies, esto significa que prefieren que los dejes solos. Asimismo, si hablas con alguien y sus pies apuntan fuera de ti, podría sugerir que desea abandonar la conversación.