Tras un accidente, bebé quedó ‘decapitado’, pero los doctores logran unir su cabeza y columna

Era un día normal, y el pequeño bebé Jackson Taylor iba en la parte posterior del auto, asegurado con su silla especial. Con apenas 16 meses de nacido, su vida cambió por completo tras un terrible accidente de tránsito donde sufrió una ‘decapitación interna’, es decir, su columna y cabeza quedaron separadas. Le hecho conmocionó a toda la comunidad médica de Australia y si hoy el pequeño sigue con vida, es gracias a una proeza médica.

MIRA ESTO: ELLA RESCATÓ A UNA NIÑA ENFERMA EN HAITÍ, DOS AÑOS DESPUÉS LA PEQUEÑA LUCE IRRECONOCIBLE (FOTOS)

Tras el impactante choque, Jackson y sus padres fueron derivados al hospital más cercano. La condición del bebé era crítica y los doctores tuvieron que actuar de inmediato. Le practicaron una cirugía que duró 6  horas. El objetivo era unir la cabeza con la columna vertebral y para ellos se necesitaron las vértebras de un hilo metálico y trozos de la costilla de Jackson. La operación significaba toda una hazaña en el mundo científico.

Jackson Taylor tenía 16 meses de edad cuando sufrió el terrible accidente

Según los médicos, Jackson habría sifrido una 'decapitación interna'

“Muchos niños habrían fallecido tras sufrir un accidente como este. Incluso si los trabajadores de emergencias consiguen revivirlos y que su corazón vuelva a latir, lo más probable es que se queden paralíticos o necesiten soporte vital para poder vivir”, declaró el doctor Geoff Askin a 7NewsMelbourne.

Jackson hoy está con vida gracias a una proeza médica

TIENES QUE VER ESTO: ELLA PARECE ESTAR EMBARAZADA, PERO EN SU VIENTRE ESCONDE UN TERRIBLE SECRETO

Los padres de Jackson están felices con su asombrosa recuperación y confían que pronto podrá tener una 'vida normal'

La operación fue un éxito y todo gracias a un aparato que permitía que la cabeza permaneciera inmóvil. Jackson puede sonreír, hablar y abrazar a sus padres con delicadeza, pues deberá vivir 8 meses más con ese dispositivo. El desafío es grande, pero los padres del bebé están seguros que se recuperará totalmente y podrá tener una vida normal, como cualquier niño de su edad ¡Mucha fuerza Jackson!