La historia de la enfermera que mató a nazis con sexo

Una de las misiones más nobles es ser enfermera en una guerra, junto con la cruz roja, ellas son incluso más valientes que muchos combatientes.

Y este año se rindió homenaje en el pueblo checo de Trebon a una enfermera, pero no por su labor curando, sino contagiando soldados nazis.

La historia cuenta que durante la II Guerra Mundial la enfermera fue violada por las fuerzas lideradas por Adolf Hitler, ella sufrió el rechazo de su propia comunidad.

Nadie sabía su plan, pero empezó a tener relaciones sexuales con las tropas alemanas;  así su venganza en aras de justicia con ella misma y su pueblo se verían saciadas.

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Este homenaje se realizó en el 2012, pero tuvo que pasar dos años para que, en el 2014, los medios lo hagan público.

La enfermera los contagiaba de sífilis y mientras más relaciones tenía con los soldados más se infectaba y mayor era su trasmisión a los hombres. Lo paradójico es que ellos morían y ella fue ejecutada por la Gestapo.

Este acto se dio a conocer por la placa conmemorativa en la fachada de la casa en donde vivía la enfermera checa, allí ahora mora el abogado jubilado Karel Friml, de 79 años, quien declaró.

 "Sus actos fueron su propia resistencia y venganza por la violación de su país y la suya propia", ha declarado Friml al diario británico 'Daily Mail'. El abogado tiene constancia de que la enfermera "tenía muchos amantes alemanes, quizás seis, quizás diez, quizás más".

Mientras que la historiadora y encargada del museo de Trebon, Jirina Psikova, afimar que esta fémina es reconocida históricamente por los residentes a través de su labor.

"Algunos dicen que era una prostituta y que transmitía enfermedades de transmisión sexual entre los oficiales alemanes, pero otros la consideraban una auténtica patriota que fue violada e infectada por los nazis y que decidió cobrarse su venganza", ha explicado.