Esta imagen ganó un premio, pero su trágica historia llevó a la depresión al fotógrafo
En las redes sociales ha comenzado a circular una imagen realmente impactante. Logró ganar un premio, pero su historia llevó al fotógrafo a la depresión.
Su historia llevó al fotógrafo a la depresión.
La vida animal es realmente cruda, sobre todo cuando se trata de sobrevivir. Esto nos lo han enseñado desde que estábamos en el colegio, pero nunca nos mencionaron que en este reino también hay emociones, sensaciones, sacrificios y sufrimiento.
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Incluso, la procreación es más que solo perpetuar la especie, en innumerables ocasiones hemos visto que las hembras son capaces de todo por defender a sus crías, como lo haría una madre humana y esta esencia de la maternidad es lo que un fotógrafo plasmó en esta imagen.
Aunque la foto circula en internet desde principios de año, en las redes sociales, específicamente Facebook, se ha hecho viral en las últimas semanas, pues no solo es impactante para la vista, sino que la historia que guarda ha dejado fríos a todos.
No se manejan datos exactos, pero según algunos portales animalistas, como Animal love o Mundo desconocido, la imagen que ves ganó un premio como la mejor foto de la década, pero el fotógrafo que capturó el momento se sumergió en una gran depresión, pues fue testigo de lo que realmente pasó.
Resulta que un grupo de guepardos empezó a seguir a una mamá ciervo con sus dos crías, pero al final los felinos acabaron con la vida de la hembra, mientras que los bebés lograron escapar.
Según contó el fotógrafo, la madre pudo haber escapado fácilmente de los guepardos, pero prefirió quedarse como carnada para ellos, para que sus pequeños ciervos pueda huir mientras ocurría la matanza.
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Y como una imagen dice más que mil palabras, se puede apreciar el terrorífico momento en el que los felinos se disponen a insertar sus colmillos sobre ella, mientras su mirada se dirige hacia sus bebés, como asegurándose de que están a salvo y como diciéndoles “adiós, sigan adelante”.
Sin duda, la esencia de ser madre no es exclusiva de los seres humanos.