¿Por qué este hotel destinado para los nazis por Adolfo Hitler nunca se inauguró?

Estaba destinado a ser el hotel más grande del mundo. El complejo, creado para convertirse en el más largo e  imponente de su época, sólo era digno de «una raza superior», y así lo mandó construir uno de los mayores dictadores y  genocidas de la historia, Adolf Hitler. Tiene 10 mil habitaciones y una extensión de casi 5 kilómetros de distancia, todos los cuartos tienen vista al mar, su construcción es propia de la de un hotel de cinco estrellas, cuenta con piscinas y está ubicado en una zona cálida, donde reina el sol, el único detalle es que en este hotel nunca se llegó a inaugurar.

“Quiero que todos los trabajadores alemanes puedan acceder a unas vacaciones suficientes y que se haga todo lo posible para que todo su tiempo de ocio les proporcione el necesario descanso. Mi deseo es que el pueblo alemán sea mentalmente fuerte», rezaban los panfletos promocionales firmados por el propio “Führer”.

Este hotel está ubicado sobre la costa de Rügen, una idílica isla en el noreste de Alemania, en el mar Báltico y fue construido entre 1936 y 1939, justo en el tiempo que estalló la Segunda Guerra Mundial y precisamente fue Hitler quien ordenó la construcción de este hotel de 5 estrellas. La realidad de este hotel es que no se llegó a concluir debido a que Hitler tuvo como prioridad la Guerra. La capacidad del hotel era de 20 mil personas.

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Cuando estalló la Guerra los obreros fueron llevados a Alemania para apoyar en una fábrica de armas. Poco tiempo después las instalaciones del hotel, a medio acabar, fueron usadas como refugio por los alemanes.

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Este complejo tiene 10 mil habitaciones

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Fue abandonado para darle prioridad a la Segunda Guerra Mundial

Lució en ruinas por mucho tiempo

Un nuevo proyecto piensa cambiarle la cara

Será reestrablecido para inmigrantes

Acabada la Segunda Guerra Mundial, Prora cayó en manos de los soviéticos, quienes acabaron cediendo el complejo a la Alemania Oriental tras la reunificación del país. El ejército abandonó el lugar poco después y la decadencia empezó a atacar a los edificios de la ciudad vacacional. Recién en el 2004, año en que el lugar fu vendido a una empresa inmobiliaria que se encargó de rehabilitarlos a costa de 70 millones de euros. Pero la polémica se ha encendió pues hace poco se creó un proyecto para convertirlos en un albergue para inmigrantes

Fuente: ABC.es