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¿Qué inspiró a Edvard Munch para pintar “El grito”? El misterio por fin es resuelto

¿Qué inspiró realmente al artista Edvard Munch para pintar “El grito”? Unos especialistas noruegos pusieron fin al misterio. Por años se creyó que las psicodélicas nubes de la obra fueron inspiradas en los efectos de la poderosa erupción del volcán Krakatoa.

¿En qué se basó Edvard Munch para pintar  las psicodélicas nubes de “El grito?

¿En qué se basó Edvard Munch para pintar las psicodélicas nubes de “El grito?

Estamos seguros que en alguna ocasión, quizá en una clase de arte en el colegio o universidad, has visto este cuadro. La pintura es conocida mundialmente como “El grito” y fue elaborada en 1892 por el reconocido artista Edvard Munch. El cielo de intensos colores rojizos detrás de la figura central de la pintura "El grito" no es solo un símbolo de la angustia que atormenta al protagonista. Recientemente unos investigadores noruegos realizaron un gran descubrimiento que viene sorprendiendo a todos.

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Según la nueva teoría propuesta esta semana por un equipo de investigadores noruegos, las líneas rojas y amarillas que aparecen en el cielo son probablemente una descripción realista de un raro tipo de nube que aparece de tanto en tanto a grandes alturas en el norte de Europa. De esta manera, la figura oscura que se agarra la cara con horror estaría dejando atrás a nubes estratosféricas polares, también conocidas como madreperlas o nubes nacaradas.

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"Existe información científica de que en esa época hubo nubes nacaradas en el área de Oslo y él seguramente nunca las había visto. Como artista, no cabe duda de que pudieron haberle causado una gran impresión", sostiene Helene Muri, una de las autoras del estudio.

Cabe resaltar que anteriormente, la inusual imagen del cielo en el cuadro había sido atribuida anteriormente a los efectos de la poderosa erupción del volcán Krakatoa, en Indonesia, ocurrida 9 años antes de que Munch lo pintara.