Donó su esperma durante 7 años por dinero y ahora descubre que tiene 25 hijos [FOTOS]

No le importó las posibles consecuencias que le trería ser donador de esperma, a sus 24 años y con una profesión de actor, lo único que quería era hacerse conocido y ganar dinero extra, y descubrió que los bancos de esperma pagaban hasta 100 dólares por muestra, por lo que, durante siete años, se dedicó a donar su semen, llegando, incluso, a hacerlo hasta cinco veces por semana.

Estamos hablando de Peter Ellenstein, un estadounidense de 57 años, conocido como uno de los mayores donantes de esperma en el mundo, sin imaginar que dos decadas después, las personas que llegaron a la vida gracias a él se reunirían para buscarlo.

De esa manera, la mañana del 6 de octubre del 2017, recibió un mensaje en su Facebook de una joven, llamada Rachel White, que le contaba que era fruto de una fertilización in-vitro, y que -tras hacer algunas investigaciones- él tenía grandes posibilidades de haber sido el donante.

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“Hola, Peter. Espero que estés bien. Te escribo por una circunstancia muy extraña, y desde ya te pido disculpas si me he equivocado de persona…. Yo nací en 1994 en un proceso de fertilización in-vitro.  Mi madre siempre quiso un niño y con esa nueva tecnología finalmente podía conseguir su sueño de convertirse en madre. La razón por la que te escribo es que creo que tú puedes haber sido el donante. No sé cuál es el protocolo correcto en esta situación y todavía estoy estupefacta. Si eliges no mantener contacto y ni siquiera responderme, lo entiendo perfectamente y no tendré nada en contra tuya. Solo quiero decirte gracias. Si quieres seguir por esta pequeña ventana, aquí estoy para seguir explorando…”, escribió la joven en el mensaje, quien luego se encargó de contactar a otras personas que también habrían nacido gracias a la donación de Peter.

Ellestein se casó, pero, irónicamente, nunca llegó a tener hijos propios con su mujer. Incluso, se divorció. Ahora, con 57 años y sin hijos propios, ha llegado a reunirse con 24 personas de  entre 17 y 30 años que aseguran ser sus hijos gracias a las donaciones de esperma que hizo en su juventud.

“Nunca tuve hijos y ahora de pronto me siento feliz de haber sido parte de 24 diferentes aventuras. Es una mezcla de de sentido de la longevidad, un propósito y un asombro. Son sensaciones que jamás había sentido”, expresó Ellenstein en una entrevista, en 2018.