Primeras pruebas del 6G de Samsung superan con creces lo obtenido por el 5G en toda su existencia

No cabe duda de que, en la actualidad, la importancia de las redes móviles se incrementa a pasos agigantados cada año. El hecho de que los seres humanos son cada vez más dependientes de sus smartphones y otros equipos electrónicos con conectividad a Internet ha provocado que las compañías más importantes de la industria tecnológica se preocupen en estructurar sistemas cada vez más eficientes para suplir estas nuevas necesidades.

Por supuesto, la velocidad de conexión para las redes móviles es una de las preocupaciones más grandes para las firmas de investigación y desarrollo de la tecnología mundial, por lo que incluso si la conectividad 5G no ha terminado de ser implementada en varias partes del planeta, varias compañías ya han empezado a buscar el siguiente paso para esta tecnología de la telecomunicación: la conectividad 6G.

Respecto a esto, la firma surcoreana Samsung se ha convertido en una de las primeras empresas de la industria en lograr pruebas exitosas de la conexión a la red 6G en sus respectivos laboratorios de investigación con hardware experimental. Tal como señaló en una nota de prensa, un equipo de investigadores de la Universidad de California, Santa Bárbara, junto a miembros de Samsung Research y Samsung Research America completaron con total éxito la prueba de un transmisor y receptor de 140Ghz.

El dispositivo electrónico usado en las pruebas fue desarrollado por primera vez por Mark Rodewell, profesor de Ingeniería Eléctrica e Informática UCSB, en 2017. Su función es la de ocupar un espectro inalámbrico superior a los 100Ghz y, en comparación, la red 5G ocupa hasta unos 40Ghz. La conectividad 6G supera con creces a su antecesor dado que podría llegar a operar a 140Ghz con un ancho de banda de 2Ghz, transmitiendo así 6,2 Gbps a una velocidad de 775MB/s a una distancia de 15 metros.

Por supuesto, la conectividad 6G sigue en una etapa de experimentación y se estima que estaría lista para ser usada masivamente en 2030. No obstante, el avance de estas pruebas es sumamente prometedor y demuestra que la promesa de velocidades de transferencia de datos de hasta 1Tbps no es totalmente descabellada.