Se fue presa por enviar 159 mil mensajes a sujeto que la ignoró luego de la primera cita

“Sentí que conocí a mi alma gemela”, fue la frase de Jacqueline Ades cuando intentó explicar sus acciones. La mujer de 33 años y oriunda de Arizona (Estados Unidos) es acusada de acoso por un hombre tras enviar más de 159 mil mensajes de texto.TE PUEDE INTERESAR: Páginas para ver películas y series completas en ESPAÑOL ONLINE GRATIS HDEl bombardeo de mensajes de texto ocurrieron luego de que Jacqueline Ades y un empresario, cuyo nombre se mantiene en reserva por las autoridades, tuvieran una cita. Conforme pasó el tiempo y al notar que el sujeto no respondía, la comunicación se volvió más amenazantes.Conforme reporta el medio norteamericano NY Post, el hecho sucedió a mediados del 2017 cuando ambos se conocieron a través de una aplicación para buscar pareja. Ante la ingente cantidad de mensajes el hombre le pidio a la mujer que se detenga y que no quería saber sobre ella.No obstante, Jacqueline Ades se mostró renuente y sus mensajes de amor pasaron a ser amenazas. “Te amo”, “Tienes que ser amable conmigo. Quédate para siempre”, “Haría sushi de tus riñones y palillos de tus huesos de la mano”, “Deberías morir”, entre otros, fueron los mensajes de la fémina.NO TE LO PIERDAS: Difunden videos de Yanet García en diversas páginas para adultos [FOTO]Cuando el empresario se fue de viaje se percató por un mecanismo de seguridad que la mujer había ingresado a su casa. Por ello llamó a las autoridades, quienes hallaron a Jacqueline Ades bañándose en la tina y encontraron entre sus pertenencias un cuchillo de 30 centímetros.Luego de ingresar a prisión salió bajo fianza, sin embargo, un mes después volvió a la cárcel por no presentarse a una citación judicial siendo en la actualidad donde se desarrolla el juicio. “Sentí que conocí a mi alma gemela y todo fue exactamente como fue. Y pensé que solo haríamos lo que todos los demás hacían y nos casaríamos, pero eso no es lo que sucedió”, declaró la mujer el último martes tras salir de la audiencia.