Plaga de danza: La extraña enfermedad que te hacía bailar hasta perder la vida

Aunque parezca algo imposible de creer, hace miles de años en una región de Francia, decenas de personas sufrieron una enfermedad que hasta el día de hoy, no ha podido explicar la medicina moderna.

Este raro padecimiento tuvo sus inicios en Estrasburgo en julio de 1518, cuando una mujer llamada Troffea comenzó a bailar en una de las calles de la ciudad. Después de una semana, se unieron treinta personas, luego se el número de bailarines subió y llegaron a ser cuatrocientos… ¿Pero cómo fue que llegaron a unirse tantos y qué pasó con ellos?

Las víctimas de la 'epidemia de baile' no podían dejar de moverse, a pesar de que se retorcían de dolor y exigían que los detuvieran. Al final, todos terminaron falleciendo por agotamiento físico, derrame cerebral o infarto. Aunque los vecinos querían rescatarlos, todo intento fue en vano, pues cuando los agarraban, se calmaban por un momento, pero cuando los soltaban, volvían a bailar.

«Se creía que el baile era al mismo tiempo la enfermedad y su cura»

John C. Waller, historiador británico en su libro A time to dance, a time to die: the extraordinary story of the dancing plague of 1518 (2008).

La mayoría de 'contagiados' se 'sanaron' días después, pero creían que seguían infectados y volvían a bailar para 'curarse', convirtiéndose así en un túnel sin salida. Es entonces que como una medida desesperada, las autoridades de Estrasburgo mandaron a construir un escenario en la plaza para que los bailarines pudieran desenvolverse con libertad. Pero al final fue un fracaso.

Durante semanas, los bailarines iban cayendo muertos ante la mirada de todos. Esta epidemia terminó a principios de septiembre de aquel año y solo algunos sobrevivieron. Pero lo que todos se preguntan es ¿porqué se dio este extraño fenómeno?

Según algunas teorías, esto se debió a una intoxicación alimentaria causada por productos psicoactivos del hongo del cornezuelo, que crecen en los granos del trigo, cebada y centeno. Se trata de la ergotamina, cuya estructura tiene relación con el ácido lisérgico (LSD). Pero es algo poco probable, pues el ergotismo solo te ocasiona delirios y espasmos, pero a la vez, corta el suministro de sangre en las extremidades, por lo que dificulta el movimiento coordinado.

Por otro lado, Waller sospecha que la epidemia pudo generarse por la extrema hambruna, pues en esta época los pobres de Estrasburgo estaban experimentando hambre, enfermedades y una inestabilidad mental. Por lo que según el historiador, fue un caso de histeria colectiva causada por el estrés.

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