¡Tu oportunidad! Japón está regalando casi 8 millones de casas abandonadas

Si tu sueño es viajar a Japón y vivir ahí, esta puede ser tu oportunidad. Y es que el país asiático está ofreciendo de forma gratuita miles de propiedades desocupadas, hogares en condiciones relativamente buenas que se ofrecen por nada o casi nada, reporta Insider.

Sí, como lo lees, según señalan medios locales, el número de casas abandonadas en Japón es cada vez mayor, por lo que están siendo ingresadas en unas bases de datos para venta en línea conocidas como "bancos akiya" —"akiya" se traduce como "casas vacantes".

LEE TAMBIÉN: El método japonés para combatir la pereza y que toma solo un minuto al día

Si bien, varias de las propiedades están ofertadas hasta en 30 millones de yenes (aproximadamente 262,000 dólares), hay muchas otras que conforman las de "transferencia gratuita" por la suma de literalmente cero yenes. Pagas unos cuantos impuestos y algunas comisiones para los agentes, y el lugar es tuyo.

De acuerdo con la información de medios internacionales, todo es parte de un plan de gobierno para abordar la crisis de vivienda de Japón. Según un informe del gobierno de 2013, había más de ocho millones de viviendas abandonadas en todo Japón, muchas de ellas ubicadas en áreas regionales o en las afueras de las principales ciudades, informó The Japan Times. Pero, lejos de reducir el número de viviendas desocupadas en los años siguientes, el Instituto de Investigación Fujitsu ha proyectado que ese número aumentará a más de 20 millones para 2033, lo que representa casi un tercio de todos los hogares en el país.

PUEDES VER: Seis secretos de las mujeres japonesas para tener una figura delgada

Según explicaron los expertos, este excesivo número de casas abandonadas se debe, en parte, al dramático aumento en la población de avanzada dad, pues, en Japón, la población adulta supera en creces a la joven.

A medida que más ciudadanos japoneses mueren o ingresan a casas de retiro, un número creciente de casas en todo el país se quedan vacías, sin ningún habitante. No hay suficientes jóvenes para llenar el vacío, y los jóvenes que hay se tardan mucho en formar una familia, debido a sus prioridades profesionales y laborales.