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Hallan posible “elixir de la inmortalidad” junto a un cadáver en China [FOTOS]

Un grupo de arqueólogos chinos encontró una extraña sustancia dentro de un recipiente de de 2000 años de antigüedad, que comprobarían los míticos medicamentos usados por los antiguas dinastías chinas como un "elixir de la vida eterna".

aweita.pe

El nuevo hallazgo realizado por arqueólogos chinos ha sorprendido a cientos de internautas y a la comunidad científica. Se trata de una antigua olla de bronce con un extraño líquido amarillo que, pese a tener 2000 años de antigüedad, permanecía intacto.

El descubrimiento se realizó en octubre de 2018, mientras un grupo de arqueólogos investigaban una antigua tumba, en China. Además del insólito hallazgo, los investigadores también encontraron otros restos y el cuerpo de un hombre muerto dentro de una tumba de 20 metros cuadrados.

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En un principio, pensaron que el extraño líquido que contenía la olla de bronce era vino, pero la investigación del mismo reveló que no solo contenía alcohol, sino otras sustancias  que conformarían un “elixir de la vida eterna”.

Tras múltiples pruebas para descubrir la verdadera composición de la extraña sustancia, los arqueólogos mostraron que la mezcla de 3.5 litros hallada dentro de la olla de bronce contenía nitrato de potasio y alunita como sus ingredientes principales. Dos componentes que coinciden con una receta de los antiguos textos taoístas sobre los míticos “medicamentos para la inmortalidad”, en China.

Según Shi Jiazhen, director del Instituto de Reliquias Culturales y Arqueología de Luoyang, “es la primera vez que se han encontrado sustancias como esta”, que comprueban lo relatado en los antiguos textos y leyendas de los antiguos pobladores en el país asiático.

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En declaraciones a Xinhua, Shi añadió que “el líquido es de gran valor para el estudio de las antiguas creencias chinas sobre alcanzar la inmortalidad y la evolución de la civilización china”. Indicó que las antiguas élites chinas se enfocaron en la búsqueda constante de tales remedios.

De hecho, según los textos históricos, el primer emperador de China, Qin Shi Huang, estaba obsesionado con encontrar una poción para la inmortalidad, y comisionó varias expediciones del ejército en todo el país para encontrar un elixir.