Mal humor: la ciencia revela cinco increíbles beneficios de este estado de ánimo
A menudo, solemos ignorar la tristeza y el mal humor, pero, ¿sabías que estos estados de ánimo no son del todo malos para nuestra salud? Te mostramos cinco increíbles beneficios de estos sentimientos, según la ciencia.
El mal humor nos ayuda a estar más atentos y centrados en situaciones difíciles, según la ciencia
Tal como lo señala la ciencia y la filosofía, el fin mayor del hombre es la felicidad. Por ello, toda nuestra vida es una constante búsqueda de la felicidad. No obstante, nuestra experiencia humana abarca muchas otras emociones como la tristeza y el mal humor. Pese a que siempre intentamos rechazar y menospreciar estos sentimientos, incluso, a las personas en las que predominan los mismos, varios experimentos científicos han dado cuenta de los grandes beneficios que tiene el estar de mal humor.
Según las investigaciones, este estado de ánimo, a menudo, activa una especie de alarma y nos lleva a pensar con más atención. Es decir, nos ayuda a estar más atentos y centrados en situaciones difíciles. Por el contrario, el buen humor (estar feliz)nos hace sentir más seguros, por lo que el nivel de atención al detalle disminuye.
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Para demostrarlo, un grupo de investigadores manipuló el estado de ánimo de las personas (colocándoles películas tristes y cómicas) y analizaron los cambios en el rendimiento de estas a la hora de realizar una serie de tareas cognitivas y conductuales. El resultado detalló una serie de ventajas que coinciden con los de otros estudios:
1.Mejora la memoria: en un estudio, el mal humor se tradujo en una mayor capacidad de las personas para recordar los detalles de una tienda en la que habían estado. Reafirmó que mejora los recuerdos de cosas vistas al mitigar los efectos de posibles distracciones, como la información irrelevante, falsa o engañosa.
2.Permite hacer juicios de valor más precisos: un poco de mal humor ayuda a reducir los sesgos y la distorsión a la hora de formar nuestras opiniones. Se ha probado que los jueces que están tristes se forman una impresión más fiable y precisa de los demás porque procesan los detalles de forma más efectiva. También se descubrió que el mal humor nos hace menos ingenuos y más escépticos a la hora de valorar leyendas urbanas y rumores, e incluso aumenta nuestra capacidad de detectar los engaños y nos hace menos susceptibles de confiar en estereotipos.
3.Mejora la motivación: otros experimentos revelaron que, cuando se pidió a los participantes que realizaran una tarea mental compleja, los que estaban de mal humor se esforzaron y perseveraron más, dedicando más tiempo a la tarea, intentando responder más preguntas y acertando más respuestas. Al ensalzar la felicidad y negar las virtudes de la tristeza, nos estamos poniendo metas inalcanzables y podríamos estar generando más decepción, e incluso depresión
4. Mejora la comunicación: Algunos estudios demostraron que las personas que se sienten tristes utilizan argumentos más persuasivos a la hora de intentar convencer a los demás, entienden mejor las frases ambiguas y se comunican mejor al hablar.
5. Mayor imparcialidad: otros estudios revelaron que estar ligeramente malhumorado contribuye a que los participantes mejoren la atención que prestan a las expectativas y normas sociales y hace que traten a los demás de forma menos egoísta y más justa.